Comenzó su carrera en el Manchester United, donde se destacó por su capacidad realizadora, sus precisos pases largos, los impecables tiros libres y los goles de fantasía que anotó con su equipo. David heredó la afición paterna por los Diablos Rojos y el fútbol pronto se convirtió en una verdadera pasión para él. Poco a poco fue cumpliendo sus sueños y debutó en 1995 en el conjunto por aquel entonces, y aún hoy en día, dirigido por Sir Alex Ferguson.
Parecía que se encontraba muy bien en el club de Old Trafford pero algunas diferencias con el entrenador comenzaron a alejarle de su equipo de toda la vida. El 17 de junio de 2003 decidió fichar para el poderoso Real Madrid, presidido por Florentino Pérez, un traspaso que sacudió el ambiente futbolístico. En aquella época, la obsesión del máximo mandataria del cuadro blanco por el ícono británico le impidió atender consejos de sus amigos, que le recomendaban fichar a un joven de Sporting de Lisboa llamado Cristiano Ronaldo, que para todos era el sucesor de Luis Figo.
Nada más llegar a filas del Madrid, David ganó la Supercopa de España. Por el contrario, en los años siguientes, los merengues no obtuvieron el éxito deseado de acuerdo con las inversiones realizadas. La llegada de Fabio Capello al banquillo en la campaña 2007 no fue lo mejor para Beckham, quien pasó a un segundo plano y se convirtió en un habitual entre los suplentes. A base de trabajo, consiguió revertir su situación en la plantilla y su juego fue decisivo para que los madridistas ganasen el campeonato y acabasen con cuatro años sin títulos.
Decepcionado y hasta un poco humillado, el internacional pross perdió toda la motivación que tenía. Pese a que comercialmente daba grandes réditos, comenzó a desencantarse de su estancia en el Real Madrid por lo que se iniciaron las especulaciones sobre su próximo destino. Aunque la directiva del Madrid intentó retenerlo por dos años más, el jugador les respondió que tras haber hablado con su familia había aceptado una oferta para incorporarse a Los Ángeles Galaxy a partir del mes de agosto. El presidente y mánager, el otrora jugador Alexi Lalas, reconoció el interés del Galaxy: Hay miles de clubes a los cuales les encantaría fichar a un jugador de estas características y el Galaxy es uno de ellos; queremos ser los mejores de la MLS y con David vamos por buen camino. David es verdaderamente el único que puede construir un puente entre el fútbol de Estados Unidos y el del resto del mundo".
Como cabía esperar, la operación llego a buen puerto y no tardó en anunciarse un acuerdo de 250 millones de dólares por cinco años. A ello habría que unir a la marca global con el patrocinio de varias empresas mundialmente conocidas. Su amistad con actores de fama y residir con su esposa Victoria cerca de Hollywood, la meca del cine, fueron muy tentadores para un hombre que es tan ídolo fuera como dentro de los campos de juego. David comentó: "El fútbol tiene un arrastre enorme en los niños del mundo, salvo en los Estados Unidos. Por eso quiero marcar diferencias con ellos" algo muy parecido a lo que había sucedido tres décadas antes con Pelé cuando se produjera su arribo al Cosmos de Nueva York para jugar en la temporada de 1975 en la National Association Soccer League (NASL) antecesora de la MLS.
Llegó el 13 de julio para debutar en el Home Depot Center, pero una lesión que arrastraba demoró su participación en el nuevo equipo. El inglés participó en un amistoso frente a Chelsea, donde jugó 12 minutos pero en el que no consiguió evitar la derrota (1-0). Su debut de ninguna manera fue el esperado futbolísticamente, pero cumplió con creces con la idea de generar ingresos producto de la publicidad y su imagen. Ese partido sirvió para que la gente se convenciera que era cierto, que allí estaba David Beckham.
Como futbolista quedó a deber, ya que su equipo, Los Ángeles Galaxy, que también tenía al mejor jugador estadounidense Landon Donovan, no pudo clasificar por segundo año consecutivo a la postemporada y David jugó solo 30 partidos en los que anotó 5 goles. Sin embargo, Don Garber presidente de la MLS, dice que cumplió con las expectativas en toda su extensión por la publicidad obtenida, que fue fantástica. Mientras Garber se deshacía en elogios para el astro ingles, se le olvidó mencionar a Cuauhtémoc Blanco, Guillermo Barros Schelotto, Juan Pablo Ángel, Claudio López o al propio Luciano Emilio, que sin duda fueron importantes colaboradores para el fortalecimiento de la liga en desarrollo.
Y ahora el Milan
La noticia fue dada por Adriano Galliani, vicepresidente de la escuadra lombarda, quien confirmó que a partir del próximo 7 de enero del 2009, Beckham jugará en calidad de cedido en el AC Milan. David de 33 años, intentará lograr que los ingresos por venta de entradas y publicidad se incrementen en la Serie A, ya que en cada grupo que participa es un valor agregado que se ha convertido por sí solo en una de las mayores figuras para posicionar estrategias de mercado. Su imagen, unido a los brasileños Kaká, Pato y Ronaldinho pueden hacer un negocio redondo para el club rossonero. Lo que aporte futbolísticamente Beckham será un plus extra; lo que interesa es la otra faceta de David, la publicidad, la venta de camisetas y los estadios repletos para verlo jugar.
Se asegura que volverá para la MLS una vez terminados sus compromisos con el Milan, pero veremos si es tan fácil como David y su representante lo dicen.
Esta historia continuará... porque como el cuento del Rey Midas, por ahora todo lo que toca David lo convierte en oro.
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