La superestrella del fútbol David Beckham se frotó la nariz con los maoríes en señal de saludo al ser recibido en Nueva Zelanda debido a que su equipo, Los Angeles Galaxy, jugarán un partido de exhibición este sábado contra el Wellington Phoenix.
El centrocampista firmó autógrafos para una emocionada multitud de unas 500 personas, entre ellas muchas adolescentes, que dejaron la escuela para ver al ídolo.
Beckham se mostró encantado con el recibimiento maorí que había visto por televisión previamente en partidos de la selección de rugby de Nueva Zelanda, los célebres All Blacks. "Es la primera vez que lo viví en directo", dijo. "Siempre quise verlo cara a cara y verlo fue increíble. Es maravilloso tener una bienvenida así. No ocurre todo los días", dijo el británico.
Las escuelas de Wellington han acordado que 15.000 escolares estén este viernes por la mañana en el entrenamiento abierto de Beckham y sus compañeros. Los organizadores esperan un total de 31.000 espectadores para el partido del sábado.
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